“Que el fin del mundo nos pille bailando”, canta Sabina. Y si nos sorprende bailando un buen ritmo latino aún mejor, añadimos desde el equipo de Brandwatch. Nos encanta este estilo y, por eso, hemos analizado algunas tendencias, artistas, géneros y percepciones para saber lo que piensa la gente cuando suena una buena bachata…¿O mejor una samba brasileña?

Creamos una Query (búsqueda) de música latina y, según nuestro Dashboard, los usuarios mencionan en mayor medida géneros como el reggaeton o el trap, pero sienten más simpatía por estilos clásicos como la samba y la salsa. Así lo revela el gráfico de sentimiento que hemos obtenido con Brandwatch Analytics:

Sentimiento de los estilos musicales latinos exceptuando las menciones neutrales.

 

Y es que es difícil mantener los pies en el suelo cuando estas notas con sabor a trópico se apoderan de tu cuerpo. Algunos hasta muestran el “antes” y el “después” de la clase de salsa.

Aunque suenan en las cabinas de todo el mundo y han conseguido que Justin Bieber hable más de dos palabras seguidas en castellano, el reggaeton y el trap siguen en el punto de mira por el supuesto machismo que esgrimen sus canciones:

Hay opiniones para todos los gustos y, desde luego, algunos ritmos son tan pegadizos que incluso las madres los incluyen en sus listas de Spotify (para desesperación de sus retoños):

Nadie puede negar que, cuando se trata de hacer deporte, un buen “perreo” puede motivarte bastante:

A través de nuestras reglas y categorías pudimos comprobar, de una lista de artistas, quiénes protagonizaban la conversación. Maluma es el líder con un 27% de share of voice (volumen de conversación) seguido de Luis Fonsi, el autor de la canción más reproducida por streaming de la historia, Despacito.


Hay dos hechos recientes que explican el protagonismo de estos artistas durante el mes que hemos analizado. Por un lado, la elección de Despacito como “mejor colaboración del año” en los American Music Awards (AMAs) y, por otro, el estreno de Corazón, el nuevo tema de Maluma.

La versión de Luis Fonsi, Justin Bieber y Daddy Yankee ha batido todos los récords dejando bien claro que a estos tres no les gustan las prisas. En esta línea de progresión de los distintos temas podemos ver cómo la colaboración (“collaboration of the year…”) va obteniendo más protagonismo (40% de crecimiento frente al 60% del tema “Maluma”):

Como segundo hecho relevante del mes destaca la nueva canción de Maluma, Corazón, que salió a la venta a principios de noviembre para hacer las delicias de todos los fans de este pretty o dirty boy, según la ocasión.

De hecho, comprobamos que tanto los premios AMAs como los temas Despacito y Corazón se posicionaron entre los hashtags más destacados:

Si algo tienen en común todos los artistas que hemos elegido, desde los consolidados como Marc Anthony o Shakira hasta los “nuevos de la clase” como Bad Bunny o Becky G, es su notoriedad en redes sociales, con séquitos de seguidores flechados por Cupido que no dudan en proclamar su amor a los cuatro vientos:

 

Conocen el lenguaje digital (o, al menos, cuentan con buenos gestores de redes) y utilizan hashtags específicos sobre sus canciones o sus estilos peculiares, así que monitorizamos algunos en nuestra investigación para saber cuál se mencionaba más.

#Despacito repitió su éxito (a estas alturas del artículo hasta nosotros la estamos tarareando), pero esta vez vimos que #Mayores, la canción que ha dado pistas claras sobre cómo es el prototipo de Becky G, ganó la partida al #FelicesLosCuatro de Maluma o a #LaNuevaReligión, la etiqueta que Bad Bunny utiliza para autoproclamarse como el creador del trap latino (reggaeton + rap).

 

Este pequeño estudio sobre la música latina, que nos ha permitido jugar con datos proporcionados por más de 700 000 menciones, revela algunos aprendizajes más profundos:

  • Los hechos noticiosos pueden influir en el número de menciones y en el sentimiento que genera un cierto tema o persona.
  • No podemos quedarnos con los datos en bruto, sino contextualizar e investigar un poco más a fondo para saber de verdad qué es lo que piensa la gente (un nivel de profundización que Brandwatch Analytics, por suerte, nos permite). Por ejemplo, aunque vimos que el emoji de cara triste (?) fue el más utilizado, no siempre implica un sentimiento negativo hacia el género:

No todos tenemos la misma soltura en la pista y puede que la vida no sea la fiesta que esperábamos, pero mientras estemos aquí no hay duda: bailemos “hasta que duelan los pies”.