El Social Intelligence, además de tener muchos nombres como monitorización o escucha de redes sociales, también tiene muchas aplicaciones.
De hecho, en Brandwatch nos hemos dado cuenta de que las aplicaciones son tan diversas como la propia creatividad de nuestros clientes.
Encontrar tendencias, ofrecer servicio al cliente, hacer investigación de mercado, medición de campañas, encontrar el share of voice, detectar crisis de manera oportuna, hacer benchmarking y vender en línea, son solo algunas de sus aplicaciones.
En esta ocasión nos centraremos en cómo vender en línea. Sin embargo, puedes consultar nuestra sección de guías si te interesa conocer otras aplicaciones del Social Intelligence.
Vender en línea
¿Cómo es que logramos vender algo? No se trata de forzar a las personas a que compren algo, se trata de crear un deseo por el producto o servicio que ofreces.
No importa la industria en la que te encuentres, el deseo es clave. Al usar una plataforma de Social Intelligence, como Brandwatch Analytics, es posible crear este deseo.
¿Cómo?
Los deseos varían dependiendo de la cultura y personalidad de cada individuo. Esto hace que sea particularmente importante conocer a tus clientes por completo, adaptarte al mercado al que quieres entrar y responder de acuerdo al contexto.
El Social Intelligence te permite llevar a cabo un análisis tan específico de tu audiencia como tú quieras. Es decir, además de conocer qué porcentaje de las personas interesadas en tu marca son hombres y mujeres, puedes conocer sus profesiones, hobbies, intereses, temas que discuten e incluso qué personas tienen influencia dentro de su grupo social.
Con esta información es posible crear marketing de contenido que sea relevante para ellos. Desarrollar nuevos productos que vayan dirigidos específicamente a tus clientes. Usar influencers que lleven el mensaje de tu marca a ellos directamente y adaptar el lenguaje que usas para hablar con tu audiencia.
Caso de éxito
¿Es posible crear una campaña sin invertir dinero y obtener más de 100 mil posts en Instagram en sólo tres días?
Sin duda el departamento de marketing de Starbucks sabe lo que hace.
A finales del mes pasado, lograron uno de sus mayores éxitos con el lanzamiento del Frappuccino Unicornio. Analicemos qué fue lo que lo hizo tan exitoso.
Los tres puntos clave de esta campaña fueron:
1 Se enfocaron en una demografía específica
De los 600 millones de usuarios activos de Instagram, 55% son mujeres de entre 18 y 29 años. Las mujeres son más activas en Instagram que los hombres. Y un 32% de los adultos que viven en áreas urbanas usan Instagram.
Su target: Mujeres millennials en áreas urbanas.
2 Crearon un producto perfecto para las redes sociales
Tomaron una de sus bebidas más populares: el frappuccino y, al analizar los intereses de su audiencia encontraron que los unicornios están en tendencia. Los juntaron y el producto final fue una bebida “mágica” que cambia de color, inspirada en esta criatura mitológica.
Hay a quienes les encantó el sabor y otros a quienes les pareció terrible, pero lograron que lo probaran y que generaran conversación en torno a la marca.
3 Edición limitada
La bebida estaba disponible únicamente en tres países: Canadá, Estados Unidos y México y su oferta sólo duró una semana.
Esto motivó a los clientes a comprar el suyo antes de que fuera demasiado tarde.
Estos tres puntos fueron la combinación perfecta para crear deseo.
Intención de compra
La intención de compra es entender el momento en el que alguien está pensando en comprar tus productos o servicios. Esto es importante porque te puede ayudar a medir campañas de manera eficiente y a comparar las conversaciones generales contra las que indican intención de compra.
Tomemos como ejemplo una campaña de H&M de hace algunos años. La marca utilizó a diferentes famosos para protagonizar una campaña.
Las dos personalidades que más conversación generaron en las redes fueron David Beckham y Beyoncé. Beckham rebasó el volumen generado por Beyoncé, si nos quedamos únicamente con esa métrica podríamos pensar que esto significa que su campaña fue más exitosa. Sin embargo, al usar Social Intelligence para medir intención de compra, vemos que Beyoncé obtuvo mejores resultados.
El éxito depende de las metas de cada campaña. Si lo que H&M buscaba era incrementar su brand awareness, Beckham fue más eficiente. Si su objetivo era vender más, Beyoncé generó mejores resultados.
Los negocios deben adaptarse al mercado y emplear la tecnología que tienen a su disposición para ser cada vez más competitivos. Esto es precisamente lo que ofrece Brandwatch.